Fotografía de Herr_Mueller - The Good Life #1

Una fotografía de Francesco Griselli

 



Francesco Griselli - Portrait and Martini B&W, 2017 (Flickr)



Tasos Livaditis - La espera


LA ESPERA

Había un joven demacrado, estaba sentado en la acera, era invierno, tenía frío. «¿Qué esperas?», le digo. «Otro siglo», me dice.
Y nevaba muy tranquilamente, como sobre una tumba.

Tasos Livaditis


Así aparece este poema en la revista ómnibus, n. 50, año XI, junio 2015, pero la versión original aparece de otra forma en «Χειμώνας και ποίηση» [‘Invierno y poesía’] (Kalamata Journal)


ΑΝΑΜΟΝΗ

Ήταν νέος ωχρός
καθόταν στο πεζοδρόμιο, Χειμώνας, κρύωνε.

«Τι περιμένεις;», του λέω.

«Τον άλλον αιώνα», μου λέει.

Και χιόνιζε ήσυχα – ήσυχα, όπως πάνω από έναν τάφο.


Τάσος Λειβαδίτης 


Costas Reúsis - Nadie

 

NADIE   

Tan pequeño e
Insignificante soy
Como las dimensiones
Que se extienden hasta
Una dulzura
Una belleza una
Hermosura al final del
Estigma.

Kostas Reúsis      

(Atenas, 1970)


ΚΑΝΕΙΣ

Όσο μικρός κι
Ασήμαντος είμαι
Τόσο οι διαστάσεις
Απλώνονται έως
Μία ηδύτητα
Μια ομορφιά μια
Ωραιότητα εν τέλει
Στίγματος.

Κώστας Ρεούσης


Traducción de Mario Domínguez Parra (Taller Igitur)


Un aforismo de Ricardo Martínez-Conde

 

Siempre hay un rasgo de duda en la vasija del alfarero. Quien lo advierte descubre su belleza.

Ricardo Martínez-Conde


Continuidad del cielo (inédito)




«Zur Erinnerung von Deiner Freundin Liselotte» (1946)

 


[En recuerdo de tu amiga Liselotte]


Portrait of a girl - Germany - 1946 - Studio: Foto-Herud - Hamburg. Inscribed on reverse: Zur Erinnerung von Deiner Freundin Liselotte. Stamped: Foto-Herud 13. JUN. 1946 Hamburg 1 Steindamm 23 


(Galería de Patrick Bradley en Flickr)


Leónidas Kakároglu - Lluvia de verano

 

LLUVIA DE VERANO

La tierra mojada
Por la repentina lluvia de agosto
Como tu cuerpo
Que sigue flotando en la memoria
Naufragio de otra época
Que con cada lluvia a la superficie sale
Y busca puerto para esconderse

Leónidas Kakároglu



Traducción de Natasha Lambrou leída en Poetas Siglo XXI



ΚΑΛΟΚΑΙΡΙΝΗ ΒΡΟΧΗ

Νοτισμένο το χώμα
Από την ξαφνική βροχή τ’ Αυγούστου
Όπως το σώμα σου
Που συνέχεια στην μνήμη επιπλέει
Ναυάγιο μιας άλλης εποχής
Που κάθε βροχή το φέρνει στην επιφάνεια
Και ψάχνει λιμάνι να κρυφτεί

Λεωνίδας Κακάρογλου



Y un poema de Vicente Núñez: Hipérbaton

 

HIPÉRBATON   

Todo lo que te quise
desde un rincón del tiempo
sombras son de una rara
tarde que arrasa un vértigo.

Sangran en ellas extáticos
tu hiel, mi amor y el regio
pájaro del crepúsculo
que se inmolaba espléndido.

Qué extraños nos quisimos,
de nuestro amor sabiendo
que, en cualquier parte, un día
lo perderíamos de éstos.

Vicente Núñez


Ocaso en Poley (1982)




Un aforismo de Vicente Núñez


¿Qué palabra podrá detener la cháchara para imponer la voz del silencio? 

Vicente Núñez



Poesía y sofismas II. Sofismas.  Edición de Miguel Casado.Visor, 2008.



Un aforismo de Jorge Carrol

 

Me desconozco también en los espejos.

Jorge Carrol


(Buenos Aires, 1933)



Montale en una columna de Andrea Rizzi

 

Busquemos una malla rota en la red

Se acerca la Navidad y el fin de año, tiempo de reflexión y balances, sobre todo para quienes pueden tener algunos días de descanso. Siempre mejor afrontarlo de la mano de algún titán. Uno puede ser Eugenio Montale, poeta italiano, laureado con el premio Nobel en 1975, que en la primera poesía de su primera colección —Huesos de sepia— escribió los siguientes versos: “busca una malla rota en la red / que nos oprime, ¡salta fuera, huye!”.

La imagen a la que recurre el poeta suena, un siglo después, de una viveza extraordinaria, tan precisa y fértil, y su exhortación, tan necesaria. Cuando se publicó, en 1925, Italia descendía por la pendiente fascista (Montale fue, ese mismo año, uno de los firmantes del manifiesto de los intelectuales antifascistas). ¿Qué redes nos oprimen en la Europa contemporánea?

Por supuesto, el pensamiento corre rápido a las redes sociales. Aparentemente, ofrecen conectar. En cambio, claro está, buscan hipnotizar, engancharnos, retenernos, y lo intentan con pocos escrúpulos, causando daño de mil maneras, minando la autoestima de las personas, inflamando el debate público, creando burbujas tóxicas y autorreferenciales, cosechando y revendiendo datos personales, erosionando la capacidad de interesarse por otras cosas, concentrarse, profundizar, vivir en el mundo físico. Son tanto más opresoras porque su opresión no se percibe.

También en el campo tecnológico, viene ahora la inteligencia artificial, portadora de enormes promesas —y enormes riesgos—. Nos ayudará mucho, sin duda. Agilizará tareas, aumentará la productividad. Pero: ¿cuántos puestos de trabajo destruirá?, ¿qué impacto tendrá en el debate público, o en el manejo de sistemas de control de armas? Inquieta pensar —como señalaba el historiador de Harvard Niall Ferguson en una reciente conversación con este diario en el marco de una conferencia organizada por la revista El Grand Continent en el Valle de Aosta, en Italia—, qué efecto tendrá sobre las capacidades cognitivas de personas que, ante cualquier problema, antes de razonar, de forma sistemática recurrirán a una máquina en busca de soluciones.

Pero no hay solo redes tecnológicas que oprimen. Las políticas también. Muchas sociedades europeas están cada vez más polarizadas. Los polos se alejan, en una confrontación sin cuartel, que reclama lealtades. Ese reclamo, a veces exigencia, comprime el espacio de debate. No son momentos de andarse con finuras, parecen decir —o dicen—, es el momento de cerrar filas. No solo se demoniza —desde una hueca, presunta, superioridad moral— al bando contrario, sino que se inhibe la crítica de quienes están en el mismo lado, comparten valores, pero discrepan de ciertas acciones. El cierre de filas oprime y traga inteligencia como un doble agujero negro.

En el geopolítico, a los europeos se nos echa encima la red opresora del pulso entre EE UU y China, que siguió su camino en el paso de Trump a Biden, y lo seguirá gane quien gane en las próximas elecciones estadounidenses. Se ciñe estrecho sobre nosotros, ese pulso, porque nuestra dependencia de ambos es enorme, sea en seguridad o tecnología o manufactura.

La esfera de las vidas privadas, por supuesto, tiene sus redes opresivas. Siempre las hubo. Tal vez, una especialmente problemática en nuestro tiempo, ese distorsionado entendimiento del derecho a ser felices, que no acepta la cultura del esfuerzo, que se deshace de la responsabilidad, quemando y tirando por la borda lo que sea, con escasas contemplaciones, en nombre de la búsqueda de una superficial felicidad personal.

Pues ahí están algunas redes opresivas. Algunas pertenecen a los dominios de lo sólido, del poder duro, de las relaciones de fuerza. Otras, a los rasgos específicos del mundo actual, que ya no es líquido, sino directamente gaseoso. Son invisibles, inasibles, serpenteantes. El primer reto, pues, es identificarlas.

A partir de ahí se puede buscar la malla rota. Hacen falta vista, tacto, inteligencia. Dejarse ayudar. El escritor Giuliano da Empoli, en otra conversación en Valle de Aosta con este diario, encendió maravillosamente la luz sobre una herramienta preciosa en esa tarea: la literatura. Porque la literatura, observa Da Empoli, es un arte que nos permite vivir, durante un tiempo, la vida de otros, estar en su mente, probar sus sentimientos, y por esa vía nos permite desvincularnos de esas redes que nos aíslan aunque parezcan que conecten, que nos hacen miopes aunque miremos mucho, nos enredan en un egocentrismo de corto aliento, nos incapacitan, al cabo, a la comprensión y a la empatía.

Esta columna, sin duda, tantas veces se enredó sin saber hallar la malla rota, superar miopía, egocentrismo, superficialidad o falta de coraje. Por ello, hoy, en el titular, distorsiona el verso del gran Montale para usar la primera persona del plural.


Andrea Rizzi

(El País, 23-12-2023)


Los versos citados en el primer parrafo, en el italiano original, del libro Ossi di seppia, son éstos:

Cerca una maglia rotta nella rete
che ci stringe, tu balza fuori, fuggi!





Jesús Beades - Álbum

 

ÁLBUM

Mira cómo nos miran
las figuras que somos en las fotos,
en fin de año, feria, recitales...
Esos grandes momentos que fueron, y que son
ya sólo unas escenas de un recuerdo.
De todo eso me queda este álbum
de fotos, un rumor de ecos, vasos...
Y también
la extraña sensación de estar viviendo
en una foto que veré algún día.

Jesús Beades



(Leído en Rua das Pretas



Aurora Luque - El poeta

 

EL POETA

Como la hormiga
perforando los límites
de su hoja.

Aurora Luque





Miguel d'Ors - Amandiño

 

AMANDIÑO

Amando, Amandiño, que eras de Corredoira,
cómo vuelve esta noche, con qué mágica luz,
aquel baño silvestre, y nuestras
cabriolas desnudas por el prado salpicado de bostas,
y aquella canción tuya, amigo agreste, bucanero de siete años
-«Ay, ay, ay, bendito es el borracho»-,
bajando por las hondas carballeiras
desmedida, insistente y en pelotas.
De aquel verano todo se ha perdido
menos aquella hora
maravillosamente sediciosa.

Después
tú te quedaste por tu mundo, libre de calendarios;
yo me adentré en el olor intacto de los nuevos libros.
De ellos salía el camino que -cursos, gentes ciudades-
me ha traído hasta esto.

Y ahora que contemplo mi vida
y me vienen ganas de darle una limosna,
le pregunto a los años
qué habrá sido de ti, Amandiño, amigo de un verano;
qué habrá sido de mí.

Miguel d'Ors




Alejandra Pizarnik - Lejanía

 

LEJANÍA     

Mi ser henchido de barcos blancos.
Mi ser reventando sentires.
Toda yo bajo las reminiscencias de tus ojos.
Quiero destruir la picazón de tus pestañas.
Quiero rehuir la inquietud de tus labios.
¿Por qué tu visión fantasmagórica redondea los cálices de estas horas?

Alejandra Pizarnik




(Esta fotografía de Maite Pepper iba acompañada del poema de Alejandra Pizarnik)



Nicos Cavadías - Yo amo

 

Yo amo

Yo amo lo que es triste en este mundo.
Los ojos turbios, la gente enferma,
los árboles desnudos, los parques solitarios.
Las ciudades muertas, los lugares oscuros.
Los caminantes torvos bajo el peso de un saco
que marchan hacia un muy lejano país,
los músicos ciegos en calles bulliciosas.
Los pobres, los impíos, los que sienten el hambre.
Las pálidas muchachas que esperan sin cesar
al caballero andante que vieron en sus sueños,
que aparezca desde lo hondo de un camino sin fin.
Los cisnes que se duermen sobre el plumaje blanco,
los barcos que parten hacia los nuevos viajes
y no saben si algún día a casa volverán.
Yo los amo, y me querría marchar con ellos.
Para nunca más volver.
Yo amo a las mujeres bellas que lloran,
que miran lejos, que miran tristes...
Yo amo en este mundo lo que está llorando
porque se parece a mí

Nicos Cavadías


Poema publicado como Petros Valjalas [Πέτρος Βαλχάλας] en la revista de la Gran Enciclopedia Griega [Μεγάλη Ελληνική Εγκυκλοπαίδεια] de 10/03/1929, 173, p. 103.


La Cruz del Sur (Nicos Cavadías) Introduccion y notas de David Fernandez de la Fuente, Alianza Editorial, 2021 [edición no bilingüe]



Αγαπάω

Αγαπάω τ’ ό,τι θλιμμένο στον κόσμο,
Τα θολά τα ματάκια, τους άρρωστους ανθρώπους,
Τα ξερά, γυμνά δέντρα και τα έρημα πάρκα,
Τις νεκρές πολιτείες, τους τρισκότεινους τόπους.
Τους σκυφτούς οδοιπόρους που μ’ ένα δισάκι
Για μια πολιτεία μακρινή ξεκινάνε.
Τους τυφλούς μουσικούς των πολύβουων δρόμων,
Τους φτωχούς, τους αλήτες, αυτούς που πεινάνε
Τα χλωμά τα κορίτσια που πάντα προσμένουν
Τον ιππότη που είδαν μια βραδιά στο όνειρό τους
Να φανεί απ τα βάθη του απέραντου δρόμου
Τους κοιμώμενους κύκνους πάνω στ’ ασπροφτερό τους
Τα καράβια που φεύγουν για καινούρια ταξίδια
Και δεν ξέρουν καλά αν θα γυρίσουν ποτέ πίσω
Αγαπάω, και θα θελα μαζί τους να πάω,
Κι ούτε πια να γυρίσω
Αγαπάω τις κλαμένες, ωραίες γυναίκες
Που κοιτάνε μακριά, που κοιτάνε θλιμμένα.
Αγαπώ σε τούτον τον κόσμο ό,τι κλαίει
Γιατί μοιάζει με μένα.

Νίκος Καββαδίας



«Arvoles yoran por luvyas…»

 

3.5. A pesar de las terribles condiciones de vida, los sefardíes mantuvieron su tradición cultural forjada durante siglos. El ejemplo más claro puede verse en la música: muchos deportados podían ganar una cucharada de sopa más si cantaban algo que le gustara a sus guardianes. Obviamente los deportados sefardíes acudieron a su magnífico repertorio de canciones, coplas y romances cuyo origen se sitúa en la España medieval.
De entre los cantes que los deportados cantaban en los campos hay que señalar uno que casi llegó a convertirse en un himno para los deportados sefardíes: se trata de la cantiga lírica ‘Arvoles yoran por luvyas’ cuya letra debió ser muy significativa para los deportados:

Arvoles yoran por luvyas
I muntanyas por ayres
Ansi yoran los mis ojos
Por ti, kerida amante

Torno i digo: ke va ser de mi?
En tierras ajenas yo me vo murir

Enfrente de mi ay un andjelo
Kon sus ojos me mira
Yorar kero i no puedo
Mi korason suspira

Torno i digo: ke va ser de mi?
En tierras ajenas yo me vo murir


(Traducción: los árboles lloran por la lluvia/y las montañas por los aires/ así lloran mis ojos por ti, querida amada/ vuelvo y me digo: ¿qué va a ser de mí?/ en tierras ajenas me voy a morir/ enfrente de mi ay un ángel/ con sus ojos me mira/quiero llorar y no puedo/mi corazón suspira/vuelvo y me digo: ¿qué va a ser de mi?/ en tierras ajenas me voy a morir).


(Fuente: Universidad de Murcia)



Valle-Inclán - «Nada es como es, sino como se recuerda.»

 

"Él sabe que la verdad esencial no es la baja verdad que descubren los ojos, sino aquella otra que sólo descubre el espíritu, unida a un oculto ritmo de emoción y de armonía que es el goce estético. Este gran pintor, emotivo y consciente, sabe que para ser perpetuado por el arte no es la verdad aquella que un momento está ante la vista, sino lo que perdura en el recuerdo. Yo suelo expresar en una frase este concepto estético, que conviene por igual a la pintura y a la literatura. Nada es como es, sino como se recuerda"

Palabras de Ramón del Valle-Inclán sobre Julio Romero de Torres


En el blog Persevericida 



Julio Romero de Torres - Retrato de la escritora chilena María Teresa de las Mercedes Wilms Montt (1920)



María Lainá - El enemigo del poeta

 

EL ENEMIGO DEL POETA

Bajo despacio
de repente me río sin querer
siempre me río
entro a la izquierda en la cocina vacía
abro los cuatro postigos de la ventana que da al este
me siento a la mesa con manzanas desperdigadas
me voy ensimismando a solas.

A solas disfruto de las horas del alba.

María Lainá



Ο ΕΧΘΡΟΣ ΤΟΥ ΠΟΙΗΤΗ

Κατεβαίνω σιγά
γελάω ξαφνικά χωρίς να το θέλω
πάντα γελάω
μπαίνω αριστερά, στην άδεια κουζίνα
ανοίγω το τετράφυλλο παράθυρο προς την ανατολή
κάθομαι στο τραπέζι με τα σκόρπια μήλα
ξεχνιέμαι μονάχη

Μονάχη χαίρομαι τις ώρες της αυγής.

Μαρία Λαϊνά



De su libro Miedo rosado (Ρόδινος φόβος, 1992), en la antología Los estuches de las células. Poemas 1972-2003. Traducción de María López Villalba, Obdulia Castillo y Aurora Luque. Edición bilingüe. Servicio de publicaciones, Centro de ediciones de las Diputaciones de Málaga, 2004


José Manuel Caballero Bonald - Pérdida de tiempo

 

PÉRDIDA DE TIEMPO

En la palabra tiempo anida
una gran ave blanca, una consecutiva
privación de pretéritos
y ciertos excedentes de la fugacidad.

En la palabra tiempo se intercalan
otras palabras de su misma estirpe:
el lento mar perpetuo y su inconmensurable
usura, el azar siempre errático
y el sideral boquete de la luz.

La única estrategia que puede más que el tiempo
es conseguir perderlo impunemente.

José Manuel Caballero Bonald




La noche no tiene paredes (2009)



Aníbal Núñez - “Nada queda de nuestro…”

 

Nada queda de nuestro
palomar blanco, donde
sentimos el primer
vértigo nada queda
del almendro en el que
imaginábamos lianas
y éramos dos tarzanes nada queda
de la tapia que el mundo dividía
en territorio apache
y en territorio sioux nada queda
del cuarto de las ratas
que olía a viejas historias y tampoco
queda nada me han dicho
de la terraza ni de la
galería de cristal donde el sol en invierno
se acurrucaba como un gato nada
queda de la escalera
de caracol ya nada
del jardín con castaños con acacias
con ¿qué? donde aprendimos a montar
en bicicleta nada
queda de nuestra casa
primera
Hay una valla
y detrás nada, los expertos
han medido el terreno con sus metros cuadrados
con sus gafas cuadradas han aojado el terreno
con sus zapatos negros han sumado la tierra
de nuestra infancia que hoy no tiene
dónde meterse:
está prohibido
el paso a los ajenos a la obra.

Aníbal Núñez

[1970]  


“Poemas sueltos” en Poesía reunida (1967 - 1987), Calambur, 2015


Eleni Vakaló - Las cosas en el espejo

 

Las cosas en el espejo
No son cosas
En nuestra lengua, lo mismo

Eleni Vakaló 



Τα πράγματα στον καθρέφτη
Δεν είναι πράγματα
Στη γλώσσα μας το ίδιο

Ελένη Βακαλό

Επιλεγόμενα, 1977



(Traducción de PLC)

Ελένη Βακαλό (Κωνσταντινούπολη / Estambul, 1921 - Αθήνα, 2001)


Quevedo con Flor Garduño - Amor constante más allá de la muerte

 

AMOR CONSTANTE MÁS ALLÁ DE LA MUERTE

Cerrar podrá mis ojos la postrera sombra
que me llevare el blanco día,
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera;

mas no, de esotra parte, en la ribera,
dejará la memoria, en donde ardía:
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.

Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
venas que humor a tanto fuego han dado,
medulas que han gloriosamente ardido,

su cuerpo dejará, no su cuidado;
serán ceniza, mas tendrá sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.

Quevedo



Flor Garduño (1957) - Polvo serán, más polvo enamorado, 1990


Un aforismo de Cristina Rivera Garza

 

Postrarse es una forma de caer.

Cristina Rivera Garza



(Matamoros, México, 1964)



Chabuca Granda - Ese arar en el mar

 

ESE ARAR EN EL MAR

Cuando ya se me olvide, habré olvidado
Viviré adormecida, liberada
No ansiaré la respuesta
Pues no habré preguntado
No habré de perdonar
Ni habré ofendido
Extrañaré la rumia de mis sueños
Y la dulce molienda y la esperanza
Ese constante hacer un alguien de algo
Ese afán de castilos en el aire
Extrañaré la rumia de mis sueños
Y la dulce molienda y la esperanza
Ese constante hacer un alguien de algo
Ese afán de castillos en el aire.

Ese arar en el mar de los ensueños
Ese eterno soñar la adolescencia...

Chabuca Granda



Eugenio García - Fotografía con historia

 


Arqueología de un recuerdo, Paris, 1990 


«A veces de las vivencias quedan muy pocos recuerdos y en ocasiones nada... ni siquiera un nombre. Por eso es una situación afortunada cuando sobrevive, al menos, una foto... en este caso el retrato de una muchacha italiana que una vez cruzó mi camino y que se podría llamar Renata o Giovanna o Giuliana o cualquier nombre así.

Esta es una imagen que permaneció 20 años dormida en mis archivos y que lleva los estigmas de una degradación de la emulsión en el negativo, pero que hoy muestro como quien muestra una pieza arqueológica porque me parece bella e intensa.. Incluso diría que el tiempo, con su huella corrosiva pero convenientemente ubicada, se ha encargado de mejorarla.

También pude haber cortado la fotografía dejándola en formato cuadrado, con lo cual la composición habría sido perfecta, pero no me interesa eso, al menos no en este caso porque eso hubiera sido como amputar las trazas de una historia y de una memoria de por sí precarias.

Supongo que en la vida todo participa de esa fragilidad. Todas nuestras vivencias, nuestras alegrías y sufrimientos, todos nuestros amores y dolores... todo se borrará un buen día para siempre. Entretanto, la fotografía es como un signo más difícil de doblegar... es como una seña en la caverna del tiempo como lo son las pinturas rupestres que aún subsisten. Es su poder de prolongar y hacer persistir la memoria lo que más me fascina de ella.

Yashica FX-D, ML 50mm f/1.4, Ilford FP4, Scanner Epson 2580 (2400 ppi), Lightroom & Photoshop.»

(Aquí)

www.tintaluz.blogspot.com San José de Costa Rica





Nikos Dimou - Desgraciado

 

Desgraciado

No la esperanza.
El deseo muere al final.

Nikos Dimou



Δύστυχο

Όχι η ελπίδα.
Η επιθυμία πεθαίνει τελευταία.

Νίκος Δήμου



Angel González - Quédate quieto

 

QUÉDATE QUIETO

Deja para mañana
lo que podrías haber hecho hoy
(y comenzaste ayer sin saber cómo).

Y que mañana sea mañana siempre;
que la pereza deje inacabado
lo destinado a ser perecedero;
que no intervenga el tiempo,
que no tenga materia en que ensañarse.

Evita que mañana te deshaga
todo lo que tú mismo
pudiste no haber hecho ayer.

Ángel González


Los Cuadernos de la Librería. Hiperión,1992




Unas palabras de Robert Frank sobre su fotografía

 

When people look at my pictures I want them to feel the way they do when they want to read a line of a poem twice.

Robert Frank



Robert Frank - City of London, 1951




«Yo me levantara un lunes…»

 

Yo me levantara un lunes,
un lunes por la mañana,
tomara mi cantarito
y a la fuente fui por agua.
Y en la mitad del camino
con el mi amor me encontrara;
Tírame al pecho la mano 
y al pecho me la tirara.
--Tate, tate, tú, el caballero,
déjame irme para casa:
lavaré mi lindo cuerpo,
pondré camisita blanca;
me tocaré mi cabecita
con una toquita morada,
me ceñiré mi cinturita 
con una cinta de lana.


Recogido en Melilla


Poesía tradicional de los judíos españoles. Recopilación y prólogo de Manuel Alvar. Editorial Porrúa, 1979.



Una fotografía de Daniel Blaufuks

 



Daniel Blaufuks - I Spy, da série Collected Short Stories, 2003 (160x120 cm, © Daniel Blaufuks)



Franz Baermann Steiner

 

Uno se olvida de lo que no se asombra.

Franz Baermann Steiner


Worüber man nicht staunt, das vergisst man.

 „Feststellungen und Versuche“




Franz Baermann Steiner (Karlín, Praga, 1909 - Oxford, 1952)


Tasos Livaditis - Lo mínimo

 

Lo mínimo

No es que hayas perdido tus sueños más hermosos.
No es que se hayan ido tus más preciados años.
No es, no, que hayas visto a tus últimos amigos
traicionarte o desertar. Este agujero es terrible
en el muro que con trabajo levantaste, noches en vela,
destruyendo tus manos y tus años
en las piedras –muro para ocultarte de la implacable
indiferencia del vacío.
Y ahora, un pequeño agujero, casi invisible, por donde
entra sin ruido e irrevocable
todo el frío de la gran vanidad.

Tasos Livaditis




(Traducción de Francisco Torres Córdova en La Jornada semanal




Τα Ελάχιστα

Δεν είναι που έχασες τα πιο ωραία σου όνειρα.
Δεν είναι που φύγανε τα πιο ακριβά σου χρόνια.
Δεν είναι που είδες, όχι, τους τελευταίους σου φίλους
να σε προδίδουν ή να λιποταχτούν.
Ετούτη η τρύπα είναι φριχτή
στον τοίχο που με κόπο είχες σηκώσει , νύχτες άγρυπνος,
ρημάζοντας τα χέρια και τα χρόνια σου
στις πέτρες- τοίχο, για να σε κρύβει απ’ την αμείλιχτη
αδιαφορία του κενού.
Και τώρα μια μικρή τρύπα, σχεδόν αόρατη, απ’ όπου
μπαίνει αθόρυβα κι ανέκκλητα
όλο το ψύχος της μεγάλης ματαιότητας.

Τάσος Λειβαδίτης



Chicho Sánchez Ferlosio - Pero no

 

PERO NO

Lo que termina un día
terminó.

Yo
no recuerdo nada
de
lo que me pasó.

Sí,
sé que te hice daño.
Y sé que fue
cuando ya
no era yo.

Yo
no recuerdo nada
de
lo que me pasó.

Sí,
sé que te hice daño.
Y sé que fue
cuando ya
no era yo.

No soy aquel
que se quemó contigo.
No siento ya
ni frío ni calor.

Sí,
algo de vacío
y un vago sentimiento
de dolor.

No,
no puedo acordarme
de
cómo era tu voz.

Ni
de la noche ciega
en que creí
ser de ti,
pero no.

Ya me olvidé
del brillo de tus ojos
cuando te vi
bailando un chachachá.

Y
casi no me acuerdo
de cuando me querías,
pero no.

Lo que termina un día,
terminó.


Chicho Sánchez Ferlosio


¡Esto hay que oírselo cantar a Alberto Pérez!



Una fotografía de Stefanos Kalamaris

 


Στέφανος Καλαμάρης - άγουρη  (θα περιμένουμε να πέσει), 2009


[‘verde (esperaremos que caiga)’]


Noelia Illán - Cuando el anciano poeta la llamó...

 

Cuando el anciano poeta la llamó,
se levantó con una contundencia perfecta,
aplastando como Atila todo a su paso.
Dejó el cigarrillo mal apagado en la cerámica negra
y agarró su libro con fuerza, sin alzar la vista.
Se olía a miel y a verde entonces.
Cantó como cantaba Homero las gestas,
y luego arrancó sin más una página escrita.
Del mismo modo, segura de sí, firme de fuste,
volvió a su sitio, ignorante de aplausos y risas.
Ahí deseó besarla, dice.
Ahí quiso tocar su tatuaje.
Luego, la historia continuó fuera de escena.

Noelia Illán


Volver a brindar con extraños (2018)



Juan Luis Panero - Autobiografía

 

AUTOBIOGRAFIA

Una casa vacía, otra derrumbada,
un niño muerto al que le cuentan cuentos,
despedidos fantasmas que se desvanecen,
ceniza y hueso, piedras derrotadas.
Cuartos alquilados, repetidos espacios fugaces,
las huellas de los cuerpos en las sábanas,
una pesada resaca sin destino,
voces que nadie escucha, imágenes de sueños.
Innecesarias páginas, gaviotas en la ventana,
mar o desierto, blancos despojos,
signos y rostros en la pared de la memoria.
Sucias pupilas de sol en México, tercos
los ojos redondos de la calavera
contemplan pasado, presente, futuro,
sombras tenaces, metáforas gastadas.
Miro sin ver lo que ya he visto,
humo disforme que se esfuma,
invisible mortaja bajo nubes fugaces.
Humo en la noche y la nada instantánea.

Juan Luis Panero



(Leído en Rua das Pretas)



Pablo Antonio Cuadra - La noche es una mujer desconocida

 

LA NOCHE ES UNA MUJER DESCONOCIDA

Preguntó la muchacha al forastero:
¿por qué no pasas? En mi hogar
está encendido el fuego.

Contestó el peregrino: Soy poeta,
sólo deseo conocer la noche.

Ella, entonces, echó cenizas sobre el fuego
y aproximó en la sombra su voz al forastero:
¡Tócame!, dijo, ¡conocerás la noche!

Pablo Antonio Cuadra

(Managua, 1912 - 2002)


Amália Rodrigues - Meu coração sem direito

 

Meu coração sem direito

Lá foi o tal coração
Que eu tinha contra vontade
Lá foi aquele ladrão
Não sei para que cidade

O meu velho coração
Que ficou triste comigo
Por causa desse ladrão
Não volta a ser meu amigo

Pobre de quem envelhece
Por fora do coração
Que novo nos aparece
Com uma nova paixão

Meu coração sem direito
De bater tão apressado
Anda dentro do meu peito
Onde não cabe, coitado

Vai-te embora coração
Eu não sou boa morada
Onde mora a solidão
Não há lugar p’ra mais nada


Amália Rodrigues


Poema de Amália Rodrigues, musicado y cantado por Amélia Muge. Tanta beleza…



Eduardo Malta - Amália Rodrigues (1940)

 



Eduardo Malta (1900 - 1967) - Amália Rodrigues, 1940




Costas Montis - Poetas griegos

 

Poetas griegos

Son escasos quienes nos leen,
pocos quienes conocen nuestra lengua,
permanecemos sin aplausos y sin justicia
en este rincón apartado,
pero escribir en griego nos recompensa.

Costas Montis



El poeta nacional. Ser uno de los mayores poetas de Chipre puede no ser gran cosa, visto el tamaño de esa isla mediterránea (no llega al millón de habitantes). Por eso, del bardo Costas Montis (Famagusta, 1914 - Nicosia, 2004) dijeron al otorgarle laureles en 1995 que no era solo un gran poeta chipriota, sino el principal poeta griego vivo.

Probablemente sea lo más acertado describir a Montis como poeta griego: la lengua da la medida de una identidad, y más entre quienes viven a través de la letra escrita. Ya lo dijo el propio Montis en un poema que reflexiona sobre los poetas griegos: «Son escasos quienes nos leen, (…) pero escribir en griego nos recompensa».” (…) 

Ilya U. Topper

Texto anterior más poema en griego y castellano, tomados de M’Sur



Έλληνες ποιητές‎

Ελάχιστοι μας διαβάζουν,
ελάχιστοι ξέρουν τη γλώσσα μας,
μένουμε αδικαίωτοι κι αχειροκρότητοι
σ΄αυτή τη μακρινή γωνιά,
όμως αντισταθμίζει που γράφουνε Ελληνικά.

Κώστας Μόντης




Receta de Goethe para envejecer

 

Aprende a hacerte viejo con un corazón joven. Eso es el arte.

Goethe



Lerne alt zu werden mit einem jungen Herzen. Das ist die Kunst.


(Fotografía de Neill Gallop - A detail of the head of the statue of the young Johann Wolfgang von Goethe. The statue, made by Ludwig Habich in 1903, is in the Herrengarten in Darmstadt, 2007)



Sally Mann - Tres generaciones

 



Sally Mann - Three Generations, 1991




Rui Knopfli - «Auto-retrato»


AUTO-RETRATO

De português tenho a nostalgia lírica
de coisas passadistas, de uma infância
amortalhada entre loucos girassóis e folguedos;
a ardência árabe dos olhos, o pendor
para os extremos: da lágrima pronta
à incandescência súbita das palavras contundentes
do riso claro à angústia mais amarga.

De português, a costela macabra, a alma
enquistada de fado, resistente a todas
as ablações de ordem cultural e o saber
que o tinto, melhor que o branco,
há-de atestar a taça na ortodoxia
de certas vitualhas de consistência e paladar telúrico.

De português, o olhinho malandro, concupiscente
e plurirracional, lesto na mirada ao seio
entrevisto, à nesga da perna, à fímbria da nádega;
a resposta certeira e lépida a dardejar nos lábios,
o prazer saboroso e enternecido da má-língua.

De suiço tenho, herdados de meu bisavô,
um relógio de bolso antigo e um vago, estranho nome.


Rui Knopfli


Mangas Verdes com Sal (1969)


Boris A. Novak - «El árbol…»

 

El árbol
nunca olvida
el follaje caído.

Boris A. Novak


El jardinero del silencio y otros poemas. Selección y prólogo de Laura Repovš. Traducción de Laura Repovš y Andrés Sánchez Robayna. Galaxia Gutenberg, 2018


Drevo
nikoli ne pozabi
odpadlih listou




Boris A. Novak (Belgrado, 1953) es un poeta, dramaturgo, traductor y ensayista esloveno.




Un aforismo de José Ángel Valente

 

Lentas siguen las lunas a las lunas, como cede a la luz la luz, los días a los días, el párpado tenaz al mismo sueño. Vivir es fácil. Arduo sobrevivir a lo vivido.

José Ángel Valente




Ida Vitale cumple hoy 100 años

 

RECURSOS

El sobresalto fuera del poema y dentro del poema, apenas aire contenido.

Leer y releer una frase, una palabra, un rostro. Los rostros, sobre todo.
Repasar, pesar bien lo que callan.

Como no estás a salvo de nada, intenta ser tú mismo la salvación de algo.

Caminar despacio, a ver si, tentado el tiempo, hace lo mismo.


Ida Vitale


Tiempo sin claves, Tusquets, octubre 2021


La poeta uruguaya Ida Vitale nació el 2 de noviembre de 1923 en Montevideo. Y sigue escribiendo. Enhorabuena.


Versos de José Rivas

 

Espacios que no habito
Aguas de las que no bebo
Oraciones que no digo
Adioses en que no creo

José Rivas (Sir Caravaig)

[15-2-1930 - 29-2-2012]

Versos del hospital


(De una esquela en El País)



«Death and the sleeping woman (O. Die Stund ist aus)»

 


"A naked woman lying on a bed, her head resting on a large pile of pillows on the left, her right leg resting on the floor. Approaching from the right death as a winged skeleton, who is holding up an hourglass towards the woman. Underneath the woman on the bed an elaborately draped piece of cloth, on the right a chamber pot under the bed.

Engraving made by Sebald Beham after Barthel Beham, Germany 1548. Lettered in the bottom left corner: "O. DIE STUND IST AUS" (Oh, the hour has come.')
"


(Grabado y texto en Kinzertorium)

Carlos Drummond de Andrade - Aurora

 

AURORA

O poeta ia bêbedo no bonde.
O dia nascia atrás dos quintais.
As pensões alegres dormiam tristíssimas.
As casas também iam bêbedas.

Tudo era irreparável.
Ninguém sabia que o mundo ia acabar
(apenas uma criança percebeu mas ficou calada),
que o mundo ia acabar às 7 e 45.
Últimos pensamentos! últimos telegramas!
José, que colocava pronomes,
Helena, que amava os homens,
Sebastião, que se arruinava,
Artur, que não dizia nada,
embarcam para a eternidade.

O poeta está bêbedo, mas
escuta um apelo na aurora:
Vamos todos dançar
entre o bonde e a árvore?

Entre o bonde e a árvore
dançai, meus irmãos!
Embora sem música
dançai, meus irmãos!
Os filhos estão nascendo
com tamanha espontaneidade.
Como é maravilhoso o amor
(o amor e outros produtos).
Dançai, meus irmãos!
A morte virá depois
como um sacramento.


Carlos Drummond de Andrade


Brejo das almas (1934)


AURORA 

El poeta iba borracho en el tranvía.
El día empezaba detrás de los patios.
Las pensiones alegres dormían tristísimas.
Las casas también iban borrachas.

Todo era irreparable.
Nadie sabía que el mundo iba a acabarse
(sólo un niño se dio cuenta, pero se calló),
que el mundo iba a acabarse a las 7:45.
¡Últimos pensamientos! ¡Últimos telegramas!
José, que colocaba pronombres,
Helena, que amaba a los hombres,
Sebastián, que se arruinaba,
Arturo, que no decía nada,
embarcan hacia la eternidad.

El poeta está borracho, pero
escucha una llamada en la aurora:
¿Vamos a bailar todos
entre el tranvía y el árbol?

¡Entre el tranvía y el árbol 
bailad, hermanos míos!
¡Aunque sea sin música,
bailad, hermanos míos!
Los hijos nacen
con tanta espontaneidad.
Qué maravilloso es el amor
(el amor y otros productos).
¡Bailad, hermanos míos!
La muerte vendrá después 
como un sacramento.

(Traducción de PLC)


Tres aforismos de Enrique José Varona

 

Si nos es tan dificil comprender lo que ocurre en torno nuestro, aquello de que somos, por decirlo así, testigos, ¿qué será cuando se trate de lo que se aleja de nosotros,y, por tanto, cuanto más se aleja?

*

Somos un péndulo que oscila entre el sí y el no. Pero el arco descrito es inmenso.

*

Cierto. El hombre es un sembrador. Lanza sus granos de noche, sobre arena y con viento.


Enrique José Varona
(Camagüey, 1849 - La Habana, 1933)


Wikipedia


Disparos al aire. Antología del aforismo en Hispanoamérica (Hiram Barrios). Ediciones Trea, Gijón, 2022



El mapa de Fra Mauro




Fra Mauro map [c 1450] - South is on top

This is an 1804 copy of perhaps the first ‘modern’ world map, made by the Venetian monk Fra Mauro in about 1450. It points south because 15th-century compasses were south-pointing. It shows the Portuguese discoveries in Africa and questioned the authority of medieval and classical sources. Intended for display in Venice, it emphasises the feats of Marco Polo. The British East India Company commissioned this copy, thus implying that Britain was heir to the Portuguese empire.

William Frazer: London and Venice, 1804 Manuscript on vellum : BL Add. MS 11267







Adam Zagajewski - Autorretrato

 

AUTORRETRATO 

Entre ordenador, lápiz y máquina de escribir
se me pasa la mitad del día. Algún día se convertirá en medio siglo.
Vivo en ciudades ajenas y a veces converso
con gente ajena sobre cosas que me son ajenas.
Escucho mucha música: Bach, Mahler, Chopin, Shostakovich.
En la música encuentro la fuerza, la debilidad y el dolor, los tres elementos.
El cuarto no tiene nombre.
Leo a poetas vivos y muertos, aprendo de ellos
tenacidad, fe y orgullo. Intento comprender
a los grandes filósofos la mayoría de las veces consigo
captar tan sólo jirones de sus valiosos pensamientos.
Me gusta dar largos paseos por las calles de París
y mirar a mis prójimos, animados por la envidia,
la ira o el deseo; observar la moneda de plata
que pasa de mano en mano y lentamente pierde
su forma redonda (se borra el perfil del emperador).
A mi lado crecen árboles que no expresan nada,
salvo su verde perfección indiferente.
Aves negras caminan por los campos
siempre esperando algo, pacientes como viudas españolas.
Ya no soy joven, mas sigue habiendo gente mayor que yo.
Me gusta el sueño profundo, cuando no estoy,
y correr en bici por caminos rurales, cuando álamos y casas
se difuminan como nubes con el buen tiempo.
A veces me dicen algo los cuadros en los museos
y la ironía se esfuma de repente.
Me encanta contemplar el rostro de mi mujer.
Cada semana, el domingo, llamo a mi padre.
Cada dos semanas me reúno con mis amigos,
de esta forma seguimos siendo fieles.
Mi país se liberó de un mal. Quisiera
que le siguiera aún otra liberación.
¿Puedo aportar algo para ello? No lo sé.
No soy hijo de la mar,
como escribió sobre sí mismo Antonio Machado,
sino del aire, la menta y el violonchelo,
y no todos los caminos del alto mundo
se cruzan con los senderos de la vida que, de momento,
a mí me pertenece.

Adam Zagajewski



(Versión de Elzbieta Bortkiewicz)


Judith Herzberg - Hilvanando

 

HILVANANDO

Ya no soy aquel que lo recuerda
soy aquel al que le sucedió.

Ya no soy aquel al que le sucedió
soy aquel que ya no lo recuerda.

Soy aquel que lo recuerda
mas no aquel al que le sucedió.

Judith Herzberg




Todo lo que es pensable (Antología). Selección, traducción y prólogo de Ronald Brouwer. (Edición bilingüe). Pre-Textos, 2019.



Nikos Fokás - Edad madura

 

EDAD MADURA

En vísperas del florecimiento me encontré recuerdo en una arboleda.
La tierra montañosa, despierta por la lluvia
Los árboles desnudos y sin hojas parecían apenas existir.
Imperceptibles en la luz como en la oscuridad.

Ahí estaba, en mi primera juventud, con un
Viejo apoyado en mí.
La mitad encima de mí como un pletórico parásito:
Vestido de negro, formal como alguien que lleva luto.

Y yo como de luto lloraba con un llanto así incontenible
Como si mi corazón quisiera rechazar
El resto del cuerpo. Alrededor no había nadie más.
Tan abundante era la luz, tan increado el mundo.

Nikos Fokás


Véase La Jornada. Semanal, núm. 64, 29/VII/ 2007. Este poema está tomado del libro Proyección sobre azul, 1972.

Versión de Francisco Torres Córdova






Una fotografía de Christian Roland

 



Christian Roland - Come as you are, Berlin 1986 - When we were young 

Photo of a Photo taken in 1986 in Berlin, Prenzlauer Berg, Helmholtzplatz

(Flickr)



Camões - «O nome que no peito escrito tinhas.»

 

Estavas, linda Inês, posta em sossego,
De teus anos colhendo doce fruto,
Naquele engano da alma, ledo e cego,
Que a fortuna não deixa durar muito,
Nos saudosos campos do Mondego,
De teus fermosos olhos nunca enxuto,
Aos montes ensinando e às ervinhas
O nome que no peito escrito tinhas.


Camões

Canto III, estrofe 120, Os Lusíadas (1572)





Juan Carlos Reche Cala - Poema de amor sin artificio

 

POEMA DE AMOR SIN ARTIFICIO

Qué triste sería la vida
si no estuvieras tú
para destrozármela.

Juan Carlos Reche Cala



Poema inédito, publicado en Feroces (Radicales, marginales y heterodoxos en la ultima poesía española) Selección de Isla Correyero. DVD poesía, octubre 1998.



Francis Picabia - Retrato de una rubia

 


Francis Picabia - Portrait of a Blonde [c.1942-43]

This painting depicts one of the actresses who was in vogue at the time, Madeleine Sologne (born Madeleine Simone Vouillon). Her cinematic career began in 1936 with a small role in La Vie est à nous by Jean Renoir. At this time she also became a model for Moïse Kisling who painted several portraits of her, It was a 1943 film entitled L’Eternel Retour, written by Jean Cocteau directed by Jean Delannoy that made Madeleine Sologne a star. Alongside the film’s other lead, Jean Maraism she embodied French youth under the Occupation. It was during this period that Picabia decided to take inspiration from the many photographic images of her to paint the present picture.

[Sotheby’s, Paris - Oil on card, 53.5 x 43.5 cm]


Imagen y texto en Gandalf's Gallery 




Balthus - La falda blanca

 


Balthus (1908 - 2001) - La jupe blanche, 1937



Góngora - «Cada uno estornuda…»

 

Cada uno estornuda
como Dios le ayuda.


Sentencia es de bachilleres,
después que se han hecho piezas,
que cuantas son las cabezas
tantos son los pareceres;
en materia de mujeres
se desboca esta sentencia,
que hay espuelas de licencia,
sin haber freno de duda.
Cada uno estornuda
como Dios le ayuda.


Cánsase el otro doncel
de querer la otra doncella
que es bella, y deja de vella
por una madre crüel;
y apenas se cansa él,
cuando sobra quien le cuadre,
porque para un mal de madre
cien escudos son la ruda.
Cada uno estornuda
como Dios le ayuda.


Este no tiene por bueno
el amor de la casada,
porque es dormir con espada,
y la víbora en el seno;
a aquel del cercado ajeno
le es la fruta más sabrosa,
y coge mejor la rosa
de la espina más aguda.
Cada uno estornuda
como Dios le ayuda.


Muchos hay que dan su vida
por edad menos que tierna,
y otros hay que los gobierna
edad más endurecida;
cuál flaca y descolorida,
cuál la quiere gorda y fresca,
porque Amor no menos pesca
con lombriz que con aluda.
Cada uno estornuda
como Dios le ayuda.

Luis de Góngora



Bertolt Brecht - ¿Pero qué esperáis?

 

¿PERO QUÉ ESPERÁIS?

¿Pero qué esperáis?
¿Que los sordos se dejen convencer
y que los insaciables
os devuelvan algo?
¿Que los lobos os alimenten, en vez de devoraros?
¿Que por amistad
los tigres os inviten
a que les arranquéis los dientes?
¿Es eso lo que esperáis?

Bertolt Brecht



(En: Brecht, Poemas 1913-1956. Edit. Brasiliense, 1986. Traducción A. Marcos)  



N.B. Quiero hacer notar que, si bien donde he encontrado el texto aparece como título del poema el primer verso, el texto original alemán lleva como título Die Hoffenden, "Los que esperan".



DIE HOFFENDEN

Worauf wartet ihr!
Dass die Tauben mit sich reden lassen
und dass die Unersättlichen
Euch etwas abgeben?
Die Wölfe werden Euch nähren
statt Euch zu verschlingen.
Aus Freundlichkeit
werden die Tiger Euch einladen
bihnen die Zähne zu ziehen!
Darauf wartet ihr!





Nikiforos Vretakos - El hombre y el caballo

 

EL HOMBRE Y EL CABALLO

Tenía un caballo. Fue a la guerra.
No habían pasado dos meses cuando regresó
con un pie amputado. Al verlo
su caballo relinchó.
           Pocos
días después, se lo requisaron.

Nunca volvió.

Y desde entonces, cuando quería
recordar algo inolvidable
de su vida, algo hermoso
—la Virgen, Cristo o el sol
por ejemplo—
            recordaba
aquel relincho.

Nikiforos Vretakos



Poesía griega moderna (Horacio Castillo) Selección, traducción directa del griego, prólogo y notas, por el autor. Instituto Griego de Cultura, Buenos Aires, 1997  [no bilingüe]



Ο άνθρωπος και το άλογο

Είχε ένα άλογο. Πήγε στον πόλεμο.
Δεν πέρασαν δυο μήνες που γύρισε πίσω
με κομμένο το πόδι του. Όταν τον είδε
τ’ άλογό του χλιμίντρισε.
           Λίγες
μέρες μετά, το επιτάξανε.

Εκείνο δε γύρισε.

Κι από τότε, όταν ήθελε
να θυμηθεί κάτι αξέχαστο από
τη ζωή του, κάτι όμορφο
– την Παναγία, το Χριστό ή τον ήλιο
παραδείγματος χάρη –
             θυμόταν
αυτό το χλιμίντρισμα.

Νικηφόρος Βρεττάκος


Το βάθος του κόσμου (1961)



Claudia Cardinale como Angelica Sedara

 






Ali MacGraw, por William Claxton

 



Ali MacGraw, retratada por William Claxton en 1971.




Bernardino Luini - Una mujer

 



Bernardino Luini (1480/82 - 1532) - Una donna,  early 1500s, Detroit Institute of Art




Jorge Luis Borges - La cierva blanca

 

LA CIERVA BLANCA

¿De qué agreste balada de la verde Inglaterra,
de qué lámina persa, de que región arcana
de las noches y días que nuestro ayer encierra,
vino la cierva blanca que soñé esta mañana?
Duraría un segundo. La vi cruzar el prado
y perderse en el oro de una tarde ilusoria,
leve criatura hecha de un poco de memoria
y de un poco de olvido, cierva de un solo lado.
Los númenes que rigen este curioso mundo
me dejaron soñarte, pero no ser tu dueño;
tal vez en un recodo del porvenir profundo
te encontraré de nuevo, cierva blanca de un sueño.
Yo también soy un sueño fugitivo que dura
unos días más que el sueño del prado y la blancura.

Jorge Luis Borges


La rosa profunda (1975)




Charlotte Rampling, por Clive Arrowsmith

 



Charlotte Rampling, retratada por Clive Arrowsmith, 1970



Tamara de Lempika - El camisón rosa II

 


Tamara de Lempika (1898 - 1980) - La chemise rose II (1928)



José Afonso - Que amor não me engana

 

QUE AMOR NÃO ME ENGANA

Que amor não me engana
Com a sua brandura
Se da antiga chama
Mal vive a amargura

Duma mancha negra
Duma pedra fria
Que amor não se entrega
Na noite vazia

E as vozes embarcam
Num silêncio aflito
Quanto mais se apartam
Mais se ouve o seu grito

Muito à flor das águas
Noite marinheira
Vem devagarinho
Para a minha beira

Em novas coutadas
Junto de uma hera
Nascem flores vermelhas
Pela primavera

Assim tu souberas
Irmã cotovia
Dizer-me se esperas
P'lo nascer do dia

José Afonso


Documento com a letra da canção "Que amor não me engana", usada nas gravações do álbum "Venham mais cinco" de José Afonso (1973). (Arquivo José Mário Branco)





Albert Camus

 

Puedo sentir este corazón que hay en mí, y juzgo que existe. Puedo tocar este mundo e igualmente juzgo que existe. Ahí termina toda mi ciencia, lo demás es construcción.

Albert Camus, El mito de Sísifo (1955)



En El bazar de la memoria (Cómo construimos los recuerdos y cómo los recuerdos nos construyen), de Veronica O'Keane. Siruela, 2021




Blas de Otero - «Por vuestra sabia mano gobernada»

 

«Por vuestra sabia mano gobernada»

Serenidad, seamos siempre buenos
amigos. Caminemos reposada-
mente. La frente siempre sosegada
y siempre sosegada el alma. Menos

mal que bebí de tus venenos,
inquietud, y no me supiste a nada.
El aire se serena, remansada
música suena de acordes serenos.

No moverán la hoja sostenida
con mis dedos, a contra firmamento
en medio del camino de mi vida.

Vísteme de hermosura el pensamiento,
serenidad, perennemente unida
al árbol de mi vida a contra viento.

Blas de Otero


Hojas de Madrid con La galerna (1968 - 1977). Edicion de Sabina de la Cruz. Prologo de Mario Hernandez. Galaxia Gutenberg, 2010



“Dos lecturas del libro inedito de Blas de Otero”, de Manuel Rico.