Manuel Álvarez Bravo, El ensueño, 1931
Obra del pintor argentino Ramón Gómez Cornet (1898 - 1964), Retrato de Rosario (Retrato de niña), 1934.
De lo que se trata es de conseguir, como sea, aquel estado de beatitud que nos proporcionaba en la infancia la mezcla de la lectura de un libro de aventuras y la merienda.
Ramón Eder
Aire de comedia (2015), in Ironías, Renacimiento, 2016.
EL PRÍNCIPE DE GALES VA DE CAZA
Para mal de la garza madrugué.
Pero no eleva en vano su decencia de ave,
ni articula un intento de vuelo desvalido sin mi daño:
«desde cuándo fulminas jovenetos», plumas, aire.
Felipe Núñez
Los seres y las fuerzas, Editorial Extremadura, Cáceres, 1979
Nunca podrás deshacerte de lo que has perdido.
Miguel Ángel Arcas
(Granada, 1956)
Aforemas (2004)
PIEDRA NEGRA SOBRE UNA PIEDRA BLANCA
Me moriré en París con aguacero,
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París —y no me corro—
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.
Jueves será, porque hoy, jueves, que proso
estos versos, los húmeros me he puesto
a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto,
con todo mi camino, a verme solo.
César Vallejo ha muerto, le pegaban
todos sin que él les haga nada;
le daban duro con un palo y duro
también con una soga; son testigos
los días jueves y los huesos húmeros,
la soledad, la lluvia, los caminos…
César Vallejo
Poemas humanos (1939)
Annemarie Heinrich (Darmstadt, 1912 - Buenos Aires, 2005) fue una fotógrafa alemana con nacionalidad argentina, especializada en retratos y desnudos. Fotografió a las estrellas del cine argentino durante los años 1940.3 Fue socia fundadora del Foto Club Argentino. Sus fotografías forman parte de la colección permanente del Museo Nacional de Bellas Artes, del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, del Museo Nacional de Cine y del Museo Mundial de Tango. Fue declarada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires.
CUANDO ABRO LA CARTERA
Cuando abro la cartera
para enseñar el carné
para pagar algo
o para consultar el horario de trenes
te miro.
El polen de la flor
es más viejo que las montañas
Aravis es joven
para ser una montaña.
Los óvulos de la flor
seguirán desgranándose
cuando Aravis, ya vieja,
no sea más que una colina.
La flor en el corazón
de la cartera, la fuerza
de lo que vive en nosotros
sobrevive a la montaña.
Y nuestros rostros, mi vida, breves como fotos.
John Berger
(Traducción de Pilar Vázquez)
Poesía [1955-2008]. Ediciones Círculo de Bellas Artes, 2014 [Edición bilingüe, que incluye un CD con los poemas recitados por el autor]
WHEN I OPEN MY WALLET
When I open my wallet
to show my papers
pay money
or check the time of a train
I look at your face.
The flower’s pollen
is older than the mountains
Aravis is young
as mountains go.
The flower’s ovules
will be seeding still
when Aravis then aged
is no more than a hill.
The flower in the heart’s
wallet, the force
of what lives us
outliving the mountain.
And our faces, my heart, brief as photos.
(1984)
PARAÍSO PERDIDO Lejana infancia paraíso cielo oh seguro seguro paraíso. Quiero pedir que no y volver. No quiero oh no quiero ya no quiero no este mundo harta es la luz con mano de tristeza Harta la sucia sucia luz vestida hartas la voz la boca la catada y regustada inercia de la forma. Si no da para el día si el cansancio si la esperanza triturada y la alta pesadumbre no dan para la vida si el tiempo arrastra muerto de un costado si todo para arder para sumirse para dejar la voz temblando estarse el cuerpo destinado la mirada golpeada el nombre herido rindan cuentas. No quiero ya no quiero hacer señales mover la mano no ni la mirada ni el corazón. No quiero ya no quiero la sucia sucia sucia luz del día. Lejana infancia paraíso cielo oh seguro seguro paraíso. (1947) Idea Vilariño (Montevideo, 1920 – 2009)
No sentirse propietario de nada y, al menos, bajar la cabeza una vez al día.
Ramón Andrés
Poesía reunida. Aforismos. Edición de Andreu Jaume. Lumen, 2016.
SONETO V
Huye del triste amor, amor pacato,
sin peligro, sin venda ni aventura,
que espera del amor prenda segura,
porque en amor locura es lo sensato.
Ese que el pecho esquiva al niño ciego
y blasfemó del fuego de la vida,
de una brasa pensada, y no encendida,
quiere ceniza que le guarde el fuego.
Y ceniza hallará, no de su llama,
cuando descubra el torpe desvarío
que pedía, sin flor, fruto en la rama.
Con negra llave el aposento frío
de su tiempo abrirá. ¡Desierta cama,
y turbio espejo y corazón vacío!
Antonio Machado
Nuevas canciones (1924)
El aforismo nunca coincide con la verdad: o es media verdad o verdad y media.
Karl Kraus
Der Aphorismus deckt sich nie mit der Wahrheit; er ist entweder eine halbe Wahrheit oder anderthalb.
Dichos y contradichos (Karl Kraus), Traducción y notas de Adan Kovacsics. Editorial Minúscula, 2003 [edición no bilingüe]. Título original: Sprüche und Widersprüche, 1909.
BAJÉ AL PUERTO
Bajé al puerto y vi zarpar mis años
y las naves.
Era linda la mar tan ataviada
pero tú estabas lejos.
Y le pedí a Dios
que me dejara pasar la noche
bajo una estrella suya,
que un poco detuviera
las naves en el mar,
que parara mis años,
porque tú estabas lejos.
Nikiforos Vretakos
(1912 - 1991)
Ocho poetas [griegos] del siglo XX. Selección y traducción de Ramón Irigoyen. Mondadori, 1989 [edición no bilingüe]
Κατέβηκα στο λιμάνι
κι είδα τα χρόνια μου
και τα καράβια να φεύγουν.
Ήτανε όμορφα η θάλασσα στολισμένη,
αλλά ήσουν μακριά.
Και παρακάλεσα το Θεό
να μ’ αφήσει να ξενυχτήσω,
κάτω από ένα Του αστέρι,
να σταματήσει για λίγο
στη θάλασσα τα καράβια,
να σταματήσει τα χρόνια μου,
γιατί ήσουν μακριά.
Νικηφόρος Βρεττάκος
VUELTA A LA TIERRA NATAL
Dejé mi casa de niño; anciano regreso.
Mi acento... el mismo de este pueblo; muchas canas he perdido.
Me miran los muchachos y no me conocen.
Sonrientes, preguntan, ¿de dónde vienes, forastero?
He Zhizhang
(659 - 744)
La pagoda blanca. Cien poemas de la dinastía Tang. Selección, introducción, traducción y notas de Guillermo Dañino. Ediciones Hiperión, 2ª ed. 2009
LA MISIÓN DE LAS HOJAS
Aquella tarde rota
contra mi oído atento
yo supe que la misión de las hojas
es definir el viento
Ruy Belo
A MISSÃO DAS FOLHAS
Naquela tarde quebrada
contra o meu ouvido atento
eu soube que a missão das folhas
é definir o vento
Hay que ser breves: hubo un naufragio y ahora toca recoger aquí los restos que vaya arrojando la memoria, a los que se añadirá material nuevo: poemas, rostros, palabras...
El nombre que preside esta empresa lo he vuelto a encontrar en un poema de Claudio Rodríguez, "Lo que no se marchita", perteneciente a su libro El vuelo del celebración (1976). Reproduzco la estrofa donde aparece y, a continuación, un salto atrás, hacia Conjuros (1958), para leer "Lluvia y verano" y que nos cale esa agua de la que escribe el amigo Claudio.
Y la nueva andadura comienza hoy, día 22 de julio de 2021, vigésimo segundo aniversario del fallecimiento del poeta zamorano. ¡A tu salud, Claudio!
Estos niños que rompen el dinero
como si fuera cáscara de huevo
y saben que los números
no saltan a la comba porque tienen las piernas
flojas, menos el tres,
y saben cómo
susurra la ceniza en los dientes del lobo.
LLUVIA Y VERANO
Baja así, agua del cielo,
baja a vivir tu vida de la tierra
y a unirte al hombre, a su salud, al suelo
y al trabajo del campo. ¡Haber sentido
la pureza del mundo para ahora
contribuir a esta sazón, al ruido
de estos pies! ¿Por qué siempre llega la hora
del riego? Aunque sea en el verano
y aquí, llega tan fuerte
que no calma, no nubla al sol, da al llano
otra sequía más alta aún. Qué muerte
por demasía, pasajera
nube que iba a salvar lo que ahora arrasa.
Cala, cálanos más. ¡Lo que era
polvo suba en el agua que se amasa
con la tierra, que es tierra ya y castigo
puro de lo alto! Y qué importa que impida
la trilla o queme el trigo
si nos hizo creer que era la vida.
Claudio Rodríguez